¡NO QUIERO IR A DORMIR! 

PRESENTACIÓN:

  

El motivo por el que he elegido este libro es porque me pareció, a simple vista, muy llamativo. En segundo lugar, al leerlo, me pareció que era muy sencillo, con una moraleja claramente reflejada, y sobre todo porque me sentí bastante identificada con el protagonista, un pequeño tigre bastante rebelde al que no le gusta demasiado seguir las reglas y las rutinas diarias.  

Investigando más a fondo sobre este libro, he descubierto algunas curiosidades que han captado mi atención.  Una de ellas es que su ilustrador, Tim Warnes, recibió un premio por las coloridas ilustraciones que presenta este cuento infantil. Su autora, Julie Sykes, es bastante conocida dentro del mundo de la literatura infantil, y sus libros suelen ser sobre cosas de la vida diaria, rutinas a menudo convertidas en algo de lo que obtener una nueva lección para los más pequeños. Este detalle creo que es bastante importante, ya que normalmente se escriben historias basadas en hechos excepcionales que no ocurren todos los días.  

FICHA BIBLIOGRÁFICA: 

Título: ¡No quiero ir a dormir! 

Autor: Julie Sykes                                                           

Ilustrador: Tim Warnes   

Editorial: Juventud 

Fecha 1aedición: 1996 

Edad en la que me baso para realizar este análisis: 5 años 

FORMATO: 

• Manejabilidad: Creo que es un cuento bastante manejable, ya que no es ni demasiado grande, ni demasiado pequeño para los niños de 5 años. 

• Atractivo de la portada: Respecto a la portada, lo que más destaca es su colorido. Esto creo que es un aspecto muy positivo, ya que a los niños de esta edad, suele llamarles más la atención todo aquello que presente colores muy vivos y llamativos.  

• Ilustraciones: Creo que las ilustraciones de este libro son muy descriptivas, lo que hace que el niño no tenga la necesidad de saber leer lo que hay escrito en sus páginas, ya que están en proceso de aprendizaje de la lectura,  sino que viendo los dibujos puede hacerse más o menos una idea de cuál es el contenido de la historia que tiene entre sus manos, e ir relacionando los dibujos con las letras.  Al ser unas ilustraciones muy sencillas, permiten al niño, además de leer el cuento, jugar a identificar los animales que aparecen. 

• Tipografía: La tipografía de este cuento me parece bastante adecuada, ya que el tamaño es grande, y es perfectamente legible, a mi parecer, por un niño de segundo ciclo, que necesita un tamaño generoso, y una claridad en sus letras para que no se den dificultades a la hora de leerlo.  

CONTENIDO:

• Temas: Creo que el principal tema que hemos de destacar en este libro, es la desobediencia propia de los más pequeños. Esto es algo con lo que los lectores podrán sin duda sentirse identificados al leer este cuento, ya que es algo que ocurre en todas las familias con niños pequeños.  
  La desobediencia infantil tiene lugar debido a que desde los 2 a los 6 años aproximadamente, aparece la etapa en la que surge la voluntad del niño. Ya no es completamente manejado por sus mayores, sino que ha desarrollado cierto grado de autonomía que le permite actuar de una forma más libre. "Es en esta etapa cuando se produce un fortalecimiento del Yo infantil, que es lo que le lleva precisamente a este negativismo en un intento de afianzar su personalidad frente a los adultos, sus leyes y sus órdenes." Afirma Francisco J. Mendiguchía, especialista en psicología infantil. En mi opinión, lo que el niño pretende conseguir con esto es demostrar que, a partir de ese primer "no", sus padres también deben tener en cuenta su opinión. Además de este tema, podemos ver otros como la importancia obedecer a nuestros padres para que no ocurra nada malo, la necesidad de establecer las rutinas diarias. A esta edad las rutinas son imprescindibles. Todas las rutinas ayudarán al desarrollo psicológico del niño. Siguiendo el modelo de  Zabalza (2010), las principales funciones que desarrollaríamos al trabajar rutinas y hábitos en el entorno infantil serían: 

• Ofrecer un marco de referencia. Una vez que se ha aprendido la correspondiente rutina, el niño o niña es capaz de concentrarse en lo que está haciendo sin pensar ni preocuparse en lo que vendrá después. 
• Generar seguridad, dado que se trata de una actividad conocida por quien la realiza. 
• Actuar como indicador temporal, puesto que aporta una percepción sensorial de los distintos momentos en los que debe efectuarse la actividad permitiendo saber qué es lo que hay que hacer antes y qué después. 
• Potenciar procesos de captación cognitiva, referida a las distintas estructuras que presentan las diferentes actividades a realizar. 
• Desarrollar virtualidades cognitivas y afectivas a nivel metodológico con motivo de las posibilidades de aprendizaje posterior que tendrán los niños y niñas respecto a la adquisición de estrategias de planificación y organización de los aprendizajes. 
  Para su corta duración, es un libro que tiene muchas enseñanzas que aportar a sus lectores, ya que pueden sentirse muy identificados con el protagonista y entender, gracias a él, que siempre debemos obedecer a nuestra familia.  
  Este libro, considero que se adecúa perfectamente a las necesidades de un niño o una niña de 5 años, ya que, teniendo en cuenta que se encuentran en una etapa de iniciación a la lectura, necesitan que el texto esté compuesto por frases sencillas y cortas, con una letra legible y de un tamaño bastante grande. También presenta unas ilustraciones muy claras, en las que los niños pueden apoyarse mientras leen el texto, o bien, cuando terminan de leer una página, pueden comprobar lo que han leído mediante dichas ilustraciones.  

• Estructura: Este cuento comienza con la orden de irse a dormir por parte de la madre. Orden a la que el pequeño tigre no hace caso, y decide ir a buscar a sus amigos por la selva. Poco a poco van surgiendo nuevos personajes (diferentes familias de la selva), siempre tratando este mismo tema. Finalmente la historia concluye con un desenlace (el pequeño tigre vuelve con su madre para dormir).  
  Como podemos ver, la estructura de este cuento nos muestra tres partes muy marcadas en las que van teniendo lugar los hechos que se relatan.  Estas partes, yo las identifico como introducción, nudo y desenlace.  
  Es muy importante que la estructura de los libros infantiles esté muy marcada para que puedan comprender adecuadamente la historia que están leyendo.  

• Protagonista: En este caso, no hay duda de que el protagonista es un pequeño animal, para ser más exactos, un tigre. Sin embargo, al ser un cachorro, los niños pueden detectar muchas actitudes, como el no querer ir a dormir cuando su madre les dice, que son parecidas a las suyas. Es por esto, por lo que creo que es un personaje con el que los niños pueden sentirse perfectamente identificados, ya que se ve que es un comportamiento propio de la edad, desobediente y curioso. En mi opinión, es el protagonista perfecto para un libro de literatura infantil debido al parecido que mantiene con sus pequeños lectores. 

• Los demás personajes: Los roles del resto de personajes están claramente destacados en este cuento. De hecho, solo existen dos tipos de personajes, los padres y las crías. Por esta razón, al niño no le costará en absoluto poder diferencial que rol desempeña cada uno de ellos, identificará a la madre del pequeño tigre como su madre, y al resto de padres como los padres de sus amigos, que corresponden al resto de las crías.  

• Valores y contravalores: En este cuento podemos identificar algunos de los valores que posee el protagonista. Por ejemplo, podemos ver que es muy curioso al querer explorar la selva por la noche. También observamos que es muy sociable, ya que tiene muchas amistades, y además, de otras especies animales. Sin embargo, también se distingue claramente su mayor contravalor, que es la desobediencia y la tozudez que muestra al negarse reiteradamente cuando su madre le repite la órden de irse a dormir. Otro contravalor que observamos en este pequeño tigre es que, como ya se dice en el cuento, es realmente travieso. Todos estos valores y contravalores son muy propios de la edad en la que se encuentran, tanto el protagonista como los lectores de este cuento. Todos los niños son insaciablemente curiosos y traviesos, ya que están contínuamente observando y aprendiendo del mundo que les rodea. Por otra parte, tener muchos amigos, y de diferentes especies, también es algo que se da en todos los niños de esta edad, que apenas se fijan en las diferentes razas. La desobediencia, sin embargo, aunque es muy común a esta edad, no se manifiesta en todos los niños, pero sigue considerándose algo dentro de la normalidad, ya que todos los niños están aprendiendo dónde está su lugar.  

• Lenguaje: El lenguaje de este cuento es bastante sencillo, los niños de 5 años podrían entenderlo a la perfección. A mi parecer, diría que se trata de un cuento didáctico-moralizante, ya que su función principal es que el lector extraiga su moraleja, que es que los niños deben obedecer siempre a sus padres.  
  Respecto a las figuras literarias que podemos identificar en este cuento, yo he extraído las siguientes: 

1. Adjetivación: Desde el inicio podemos ver que el protagonista lleva incorporado un adjetivo que no se le despega durante todo el relato: pequeño, no es el tigre, sino el pequeño tigre. De esta manera, los niños pueden entender más fácilmente que se trata de una cría y no de un adulto. 

2. Repetición: A lo largo del cuento, hay una frase que se repite continuamente: "¡No quiero ir a dormir! 
   Creo que, al ser un cuento tan repetitivo, ayuda al niño a poder leer con más facilidad y comprender mejor el argumento. 

CONCLUSIÓN: 

Para comenzar con la conclusión, debo decir que yo no usaría este libro en mi aula, ya que considero que no trata ningún tema propio de la enseñanza escolar, sino que más bien es un cuento para leer en casa y que ellos mismos reflexionen sobre las enseñanzas que puede aportarles. En todo caso, podría utilizarlo como manera de repasar los animales, pero es algo que creo que los niños de 5 años tienen más que aprendido.  

Respecto a los valores que podrían extraer de este relato, creo que, al ser propios de la edad en la que se encuentran los niños, no tienen demasiado que imitar del protagonista, sino más bien aprender de lo que este hace mal, que es desobedecer a su madre cuando le da una orden.  No obstante, sí que es cierto que se podría reflexionar sobre la relación que tiene cada uno de ellos con sus padres, y si ellos mismos consideran que habitualmente les obedecen. 

Otro punto que considero que tiene a favor es que el lenguaje es muy sencillo y se lee muy fácil, además presenta una estructura perfectamente diferenciada y apenas tiene funciones del lenguaje, algo que facilita su comprensión.  

En definitiva, creo que es un cuento con una moraleja claramente destacada y que refleja una situación cotidiana en la que se pueden ver representados los lectores, y este es un valor indudablemente positivo que ayudará a los niños a plantearse el hecho de si para ellos es favorecedor hacer caso a sus padres cuando les digan que es hora de dormir. Sin embargo, creo que su uso es puramente literario y no puede aplicarse, como ya he dicho, a ninguno de los contenidos que se enseñan normalmente en el aula, ya que es una enseñanza, digamos, más para el hogar que para la escuela.